martes, 11 de diciembre de 2012

Los días son buenos

Desde hace algunos días no pulsábamos las teclas de esta computadora para escribir un poco de eso que a veces llenan nuestras almas y que podemos plasmarlo en las páginas de un blog como este.  Hoy sentimos esa motivación, la cual también esta acompañada de tristeza.  Hay situaciones que vienen en nuestro caminar que no quisiéramos de ninguna manera que se repitieran, sin embargo y sin entender mucho o tratar de hacerlo estas vienen una y otra vez.   Lo real cuando lo analizamos es que aunque los problemas vienen y van, dentro de nosotros sabemos que siempre todo tiene su final.

Solamente necesitamos esperar y estar confiados de que nuestro Dios no fallará.  Él siempre ha sido fiel, y lo seguirá siendo aunque a veces de alguna manera podamos fallar.  El salvador no es como los demás hombres, implacables, condenadores, interesados o simplemente carentes de un verdadero afecto.

Claro con el paso de los años vamos entendiendo todo esto y poco a poco nos aferramos más al Señor, quien llega a ser nuestro principal punto de apoyo y lo primordial en nuestras vidas.   Pienso que Dios mismo permite que nos desencantemos de la gente y de los que alguna vez pensamos eran amigos.  Y Digo esto porque mientras los tenemos cerca no llegamos a desarrollar en nosotros una relación plena de confianza y amistad con aquel que un día murió por nosotros en la cruz del calvario.  Nuestro socorro y verdadero amigo.  Su nombre es Jesús, El Salvador.

No hay comentarios:

Publicar un comentario